Noticias Web RFEA .- Entrevista a Simón Iglesias, presidente del Comité Nacional de Jueces

Simón Iglesias, a la derecha, durante la entrega de la Placa Juan Sastre el pasado mes de octubre en Sevilla.

Estrenamos nueva temporada y es hora de hacer balance en todos los estamentos del atletismo español. Uno de ellos, el de los jueces, cierra el curso con buenas sensaciones y afronta con optimismo el futuro. Hemos hablado con el presidente del Comité Nacional de Jueces Simón Iglesias para repasar todo lo que ha dado de si esta temporada y para hablar de los retos que vienen por delante para este colectivo. 



o Simón, vamos a entrar en el último año de mandato de la actual Junta Directiva del Comité Nacional de Jueces. ¿Qué balance haces de estos años al frente de los jueces españoles?

Hace siete años fui designado Presidente del CNJ en tiempos convulsos, tanto interna como económicamente. Por fortuna, en el plano interno hemos mejorado de forma sustancial pero en la parcela económica seguimos con menos de la mitad del presupuesto que se nos asignaba en el 2008; esto no ha impedido realizar aquellas actividades formativas necesarias para la actualización técnica de los jueces. Sí hemos reducido el número de reuniones de la Junta y el número de nombramientos en algunos puestos; igualmente hemos ajustado, siempre que ha sido posible, las distancias a la hora de hacer nombramientos. A pesar de todo ello y la ausencia de aquellas grandes competiciones controladas en las últimas décadas, el número de jueces con licencia RFEA ha ido creciendo año tras año.



o Para esta temporada que arranca las principales competiciones del año serán el Mundial de pista cubierta de Portland, el Campeonato de Europa al aire libre de Amsterdam y los Juegos de Río. ¿Cuál será la presencia de jueces españoles en estos importantes Campeonatos? 

Todos los Campeonatos importantes han tenido presencia relevante de jueces españoles. El prestigio que los avala permite que sean nombrados para las diferentes áreas de juzgamiento. Aunque sin poner nombres en estos momentos, con certeza tendremos representación española en las competiciones de 2016 y 2017.



o Coméntanos con más detalle cuál es la labor que realiza un juez observador cuando viaja acompañando a la selección española. 

Como figura en nuestra normativa, la labor de los Jueces Observadores consiste, básicamente, en integrarse en el equipo de oficiales designados, ponerse a disposición del Jefe de Equipo y colaborar con el mismo en todas las tareas que le sean encomendadas. El Juez Observador debe adoptar una visión de equipo y ser una figura que destaque por su esfuerzo y dedicación en pro del éxito de la expedición. Deberá prestar especial atención a situaciones en las que, como especialista en el conocimiento de las normas y de los procedimientos, su colaboración pueda ser determinante, como en la presentación de cualquier tipo de reclamación ante el Juez Árbitro y/o Jurado de Apelación, o la solicitud de homologación de récord. Además, deberá recopilar toda la información necesaria para poder elaborar un informe de carácter técnico que deberá presentar, ante el CNJ, con los contenidos y en los plazos que se especifican. 

El Informe debe contener, entre otros, estos apartados: Reunión Técnica (decisiones técnicas tomadas); escenario (detalle de las instalaciones: pistas, servicios periféricos, anexos, circuitos en ruta); medios técnicos usados (detalle de las innovaciones); desarrollo del Programa completo (Horario, Cámara de Llamadas, Premiaciones); actuación del Jurado (aspectos positivos, aspectos negativos, ubicación y movimientos sobre el terreno); observancia del Reglamento Internacional; reclamaciones al Jurado de Apelación y resolución de las mismas; valoración técnica global, incidiendo en aquello que sea aplicable a nuestras competiciones, etc. Este informe nos va a permitir disponer de una casuística imprescindible para la formación de los jueces en los respectivos seminarios de actualización. Como ves, una ingente tarea. 



o El pasado mes de agosto durante el Congreso de la IAAF vimos que un juez español, en este caso Antonio Pérez, era elegido para formar parte del Comité Técnico de este organismo. ¿Qué importancia tiene que tengamos un representante en este Comité y cuál va a ser su labor allí?. 

Desde hace más de dos décadas un juez español está en el Comité Técnico de la IAAF. Al manifestar Gabriel Abad su deseo de no presentarse a la reelección, la Junta Directiva del Comité Nacional de Jueces manifestó su interés a la RFEA para que uno de sus vicepresidentes, Antonio Pérez, fuera presentado a la elección de miembros del Comité. Para mí es una satisfacción personal haber comprobado que los electores de la IAAF vieron en Antonio lo que nosotros ya sabíamos: un juez español capaz, formado y con inmensas ganas de trabajar por el atletismo. 

Sobre la segunda pregunta, quien mejor sabe de su labor allí es el propio Antonio. Para el CNJ es de capital importancia su pertenencia al Comité pues ello demuestra el alto grado de consideración que la IAAF tiene de los jueces españoles y, además, nos permitirá disponer, de primera mano, de todos los cambios, modificaciones y debates que tengan lugar en el seno del Comité. Igualmente, tendremos en él un defensor importante de aquellas posibles propuestas que, desde el CNJ, se quieran presentar al Comité Técnico. 



o Al hilo de lo anterior, ¿cuál es la consideración internacional que tienen en estos momentos los jueces españoles? 

Esta pregunta habría que formulársela a los estamentos internacionales. Por la información que tenemos, y sin pecar de falsa modestia, la valoración de los jueces españoles es muy alta, tanto para formar parte de jurados internacionales como para participar en seminarios y cursos por diferentes países de Europa, Asia o América. Sólo tenemos que ver la nómina de jueces españoles en los Paneles internacionales. 



o Uno de los principales objetivos del Comité Nacional de Jueces ha sido siempre el de la formación y facilitar que los jóvenes puedan tomar el relevo también en el tema del juzgamiento. Coméntanos algo al respecto. 

Efectivamente, éste es un objetivo prioritario. La formación de un juez de atletismo, tal como está configurada en el CNJ, requiere mucho esfuerzo personal por parte de los jueces, tiempo y dinero. Del interés y esfuerzo de los implicados sólo tenemos que ver el nº de participantes en las diferentes convocatorias y seminarios; esa disposición personal no tiene precio. Debemos tener presente que la formación es permanente: para titular un Juez Nivel 1 necesitamos unos meses; para adquirir la categoría de Juez Árbitro necesitamos una década. Si añadimos a esto que para el ascenso a categorías internacionales solo presentamos Jueces Árbitros, podemos valorar el esfuerzo personal permanente de quien aspira o pertenece a un Panel internacional.

Del dinero qué vamos a decir. Todos sabemos cómo están las arcas federativas, tanto nacional como autonómicas. Siendo cierto todo esto, no es menos cierto que el nivel formativo del CNJ, en estos años de penuria, no ha bajado; es bien sabido que, en la inmensa mayoría de los casos, ha recaído en un sobreesfuerzo de todos los participantes. 



o Precisamente la mejor enseñanza es siempre la competición y en las últimas décadas hemos tenido la suerte de vivir los acontecimientos más importantes de nuestro deporte en España. ¿Qué importancia han tenido estos eventos en la formación y capacitación de los jueces españoles? 

Gracias a la RFEA y Organizadores, los jueces españoles hemos tenido la fortuna de participar, de una u otra manera, en todas las posibles competiciones de alto nivel. Desde finales de los 80 hasta 2012 hemos controlado todos los grandes eventos, tanto al Aire Libre como en Pista Cubierta. Barcelona’92, Campeonatos del Mundo, de Europa, Campo a Través, Marcha y Ruta, han pasado por nuestras ciudades, sirviendo para “reclutar” a los que hoy son los mejores jueces españoles. Ahora nos encontramos a la espera de Los Juegos del Mediterráneo en Tarragona para 2017. La convivencia, en estos Jurados, con jueces de renombrado prestigio internacional es un bagaje que difícilmente puede suplirse en el aula.



o En los últimos años se ha producido también un desarrollo importante de la tecnología en este ámbito con la incorporación de la medición indirecta, los chips en pruebas en ruta y también en algunas en pista... ¿Cómo lleváis la coexistencia con las nuevas tecnologías? ¿Crees que en algunos casos puede suplir la labor del juez? 

Tal vez una de las mejores virtudes del juez español sea su capacidad de renovación y reciclaje. El desarrollo tecnológico es imparable en la sociedad actual y, en consecuencia, en el juzgamiento del atletismo. Imposible enumerar en unas líneas las ventajas de las TIC. Sólo mencionar algunas consideraciones: ¿Qué sería del cronometraje actual sin la Foto-finish? ¿De las mediciones sin las estaciones de medición indirecta? ¿De la información en general sin pantallas, vídeos, ordenadores, marcadores, etc.? ¿De las salidas sin detector de salidas falsas? ¿Cómo controlar una prueba multitudinaria de Ruta sin el control de los Chips y video cámaras? Todo esto el juez lo sabe pero igualmente sabe que sigue siendo imprescindible. El juez debe juzgar, medir y registrar; la tecnología mide y registra pero ¿puede juzgar e interpretar una norma?



o Por último, mucho se debate en los últimos tiempos sobre la manera de hacer del atletismo un deporte más popular. ¿Qué crees que los jueces pueden aportar en este debate? ¿Podrían ayudar a popularizar nuestro deporte algunos cambios del reglamento de competición? 

Habría que ver qué entendemos por "popular". ¿Práctica masiva? ¿Espectáculo de masas? Como práctica deportiva el juez debería ser capaz de transmitir a los atletas que no es “su enemigo”, que no está para hacerle zancadillas o perjudicarlo; por el contrario, será quien certifique y dé valor universal a los registros que consiga. Como espectáculo, lo mejor que se puede decir de un juez es que ha pasado totalmente desapercibido. 

Si creemos que la popularidad de un deporte está en función de su repercusión en los Medios de Comunicación de Masas los cambios deberían ir encaminados a ese fin. Conseguir titulares periodísticos, páginas en la Web, minutos en radio o en TV debería ser objetivo prioritario para Federaciones, Organismos y Organizadores; retransmisiones dinámicas, con duración prudente, interrelación entre espectadores (sobre todo jóvenes) y atletas ayudarán sin duda a mejorar su popularidad.



Interesante debate el que apunta Simón que a buen seguro seguirá evolucionando en el futuro. De momento podemos asegurar que las competiciones atléticas que se disputan en nuestro país están en buenas manos, con jueces con una gran capacitación y formación y todo ello debemos agradecérselo a la labor que en los últimos años viene ejerciendo el Comité que preside.

 

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